12.2.06

it suits me well... di-do-da da-da

Las confesiones a medianoche están algo mitificadas. Para empezar nunca son ni muy claras, ni muy memorables, el ambiente no acompaña nunca (jamás) y a menudo la confianza se muere por exceso de ídem, por pesada, por chiclosa, por excesiva. Hoy he muerto de confianza y conmigo cualquier atisbo de Esperanza en el horizonte. Estoy algo derrotista como ven.
Les pasaré unas diapos para ilustrar mi desazón y animar la velada.
Vean, empieza así:



pero siempre termino aquí. Así.



Espera. No, no es cierto. A veces queda mejor. A ratos entra algo de luz.