16.3.08

Critica: Fragmentos

Si todos huyen, emigran, escapan es, parece decirnos, para probar su valor ante los demás, antes que a sí mismos. La emigración se plante aquí como una cuestión de falta de autoestima, razón última de la vanidad… estos personajes se valoran a sí mismos a través de los demás, sopesan su calidad como individuos con la balanza de otro… la imigración no es pues, sólo una cuestión de necesidad, ni una mera búsqueda de nuevas oportunidades… es la manera de conseguir construir un nuevo yo para todos los personajes. Yos más seguros, fuertes,hermosos, populares… yos nuevos para todos.
Por suerte para el lector irritado ante estos tipos insufribles… algunos personajes (no todos, los hay que son incorregibles) se cansan de tanta tontería y consiguen madurar a lo largo del libro. Entonces llega la catarsis y alguno de estos mezquinos termina siéndolo un poco menos. Es el único momento en el que percibimos algo de simpatía por los personajes… el resto del tiempo la situación es de una dureza tan extrema que no hay espacio para amabilidad ni compasión alguna.